La feroz represión ordenada por el gobierno de Daniel Noboa ya se cobró la vida de tres personas en el contexto del paro nacional convocado por la Confederación de Nacionalidades Indígenas.
“No más sangre de nuestro pueblo”, clamó el Partido Comunista del Ecuador (PCE) al lamentar las “nuevas víctimas mortales que ha generado la barbarie represiva” del gobierno que encabeza Daniel Noboa y añadió que “con dolor y rabia hacemos un llamado a la solidaridad nacional e internacional”, a la que instó a “repudiar la represión y persecución”.
Rosa Paqui, José Guamán y Efraín Fuerez son las tres víctimas fatales que dejó la feroz represión que el gobierno de Noboa viene desatando desde septiembre en el contexto del paro nacional convocado por la Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador (Conaie) contra el ajuste y que suma masivas movilizaciones en diferentes puntos del país. El pueblo ecuatoriano vive por estos días en bajo el terrorismo de Estado. Integrantes de fuerzas policiales y militares irrumpen en las viviendas de manifestantes sin orden judicial para llevárselos detenidos en medio de duras golpizas.
Al respecto, por medio de una reciente declaración firmada por diferentes organizaciones sociales, sindicales y políticas entre las que está el PCE, se denunció públicamente que en Ecuador “se están cometiendo delitos de lesa humanidad y se están violando, de manera generalizada y sistemática, los Derechos Humanos”, tras lo cual se advirtió que el gobierno nacional “está desplegando una estrategia de guerra cuyo objetivo militar es la eliminación de la población civil”.
Por ello, en ese documento se demanda que “los organismos internacionales y los gobiernos comprometidos con los Derechos Humanos, exijan a Daniel Noboa el cese del fuego y la represión”, pero también que desplieguen un contingente de observadores internacionales “para la verificación de los crímenes de lesa humanidad para que éstos no queden en la impunidad”.
Precisamente desde más allá de las fronteras ecuatorianas, más de un centenar de organismos de Derechos Humanos, referentes sociales y políticos firmaron una carta repudiando la represión desatada contra quienes se manifiestan en el marco del paro nacional liderado por la Conaie. Entre quienes suscriben este documento están el Partido Comunista de la Argentina y la Liga Argentina por los Derechos Humanos y personalidades como Adolfo Pérez Esquivel, quien no dudó en señalar que el gobierno de Noboa “se ha mostrado ejerciendo terrorismo de Estado”.
En esa dirección, la declaración responsabiliza a la represión gubernamental por los asesinatos de Fuerez, Guamán y Rosa Paqui que fueron perpetrados en jornadas que dejaron un saldo de “cientos de heridos, varios de ellos con proyectiles de bala, detenciones arbitrarias, montajes judiciales contra doce personas bajo la causa de terrorismo que estaban legítimamente movilizadas, actos racistas y una violencia que no cesa contra mujeres, personas mayores y niños de las comunidades”.
También puntualiza que a esto “se suma una operación militar disfrazada de convoy humanitario que incrementó la represión y la cantidad de heridos en la zona de la Esperanza” y denuncia que se producen “detenciones dentro de hospitales y militares que disparan a corta distancia contra la población civil”, por lo que tras exigir el cese de la represión y justicia para las víctimas de la violencia estatal, advierte que “el pueblo ecuatoriano no está solo”.